domingo, 30 de marzo de 2008

GUÍA PARA LA PUBLICACIÓN DE LIBROS
Datus C. Smith Jr.
ESTRATEGIA Y OBJETIVOS GENERALES

De acuerdo con Smith los libros son las mejores herramientas de la educación, razón por la cual el impulso a las empresas editoriales es fundamental para la formación de los países, incluso porque la lectura “representa la manera más económica de educación autodidáctica que supera cualquier obstáculo.”[1]

En todos los países debe existir un acercamiento de los lectores con obras y autores foráneos pero una industria local del ramo es necesaria para el enriquecimiento cultural, para garantizar oportunidades de expresión y desarrollar el sentido de unidad nacional.

Las razones anteriores deben ser expuestas a los dirigentes nacionales para lograr que éstos impulsen el fomento a la industria editorial, si están convencidos el siguiente paso es persuadirlos sobre las mediadas adecuadas para lograr el objetivo, esta problemática varía de un país a otro pero el proceso editorial es el mismo.

La industria editorial tiene cuatro elementos:
El autor: Creador o formulador de las ideas que serán comunicadas al mundo a través de un libro, éste se encargará de conjuntar los recursos para exponer sus ideas.

Esta entidad puede no ser solamente física sino un grupo, una institución o un gobierno, éstos son titulares del derecho de publicación de su obra, mismo que venderán a la casa editorial para su producción. Este proceso de compartir el trabajo logrado tiene derecho a una remuneración y a una protección efectiva de sus derechos.

Los derechos de autor están asentados en la ley de Copyright, cuyos acuerdos fueron establecidos en la Convención de Berna y la Convención Universal de Copyright y que son modificados con mucha frecuencia. Smith señala que a través de estas leyes se llevó a cabo el desarrollo explosivo del conocimiento a través de los libros.

El autor cede sus derechos de obra a través de un contrato, después de que éste se llevó a cabo el autor debe decidir cuánta participación del editor permitirá para la corrección del manuscrito.

El autor es de suma importancia para la promoción de un libro y puede sacar provecho de las sugerencias que le haga el editor, quien debe ser honesto y justo ya que el principal propósito de una obra es comunicar las ideas de autor.

El impresor: Es el fabricante y encargado del diseño del libro, quien se ocupará de la calidad en la impresión, el suministro del papel apropiado, el cuidado en la revisión de pruebas, etc. Cuando el impresor ha terminado su trabajo devuelve el libro al editor para que éste. en conjunto con el autor, pueda revisar las fallas que se le hayan escapado a los correctores tipográficos de la empresa.

Para que el impresor no ponga más dinero del que debe para la realización del libro es necesario que el editor se comprometa a pagar a tiempo mediante un contrato, por lo que cada parte debe intervenir adecuadamente y realizar un análisis de los problemas que implica la inversión de capitales a corto plazo.

[1] Smith, Datus, Guía para la publicación de libros, P. 16
FUENTE
Smith, Datus, Guía para la publicación de libros, Universidad de Guadalajara, México, 1991.

No hay comentarios: